Excepcional cantante, buena actriz, inteligente mujer e insoportable persona. Esos podrían ser los cuatro calificativos que mejor definen la personalidad de alguien tan irrepetible como Barbra Streisand.
Excepcional cantante porque su personalidad y el sentimiento que imprime a todas sus canciones han hecho de la suya una de las voces más importante de su generación; buena actriz porque ha sabido combinar la comedia con el drama o la comedia musical; inteligente mujerporque también ha abordado con éxito oreas muchas actividades empresariales asi como la dirección, composición de canciones y la producción de películas; e insoportable persona debido seguramente a sus problemas de juventud, porque la prensa , quienes se han visto obligados a atenderla y no pocos de sus compañeros de profesión, han dejado suficientes testimonios como para no dudar de sus poco refinados modales o de sus absurdos y y excéntricos caprichos, que se lo pregunten por ejemplo a los empleados del elegante hotel Dorchester de Londres, a quienes coincidiendo con una de las estancias de la diva, se les prohibió que la miraran a los ojos, cumpliendo asi una de las exigencias contractuales. ¡Genio y figura…!
Excepcional cantante porque su personalidad y el sentimiento que imprime a todas sus canciones han hecho de la suya una de las voces más importante de su generación; buena actriz porque ha sabido combinar la comedia con el drama o la comedia musical; inteligente mujerporque también ha abordado con éxito oreas muchas actividades empresariales asi como la dirección, composición de canciones y la producción de películas; e insoportable persona debido seguramente a sus problemas de juventud, porque la prensa , quienes se han visto obligados a atenderla y no pocos de sus compañeros de profesión, han dejado suficientes testimonios como para no dudar de sus poco refinados modales o de sus absurdos y y excéntricos caprichos, que se lo pregunten por ejemplo a los empleados del elegante hotel Dorchester de Londres, a quienes coincidiendo con una de las estancias de la diva, se les prohibió que la miraran a los ojos, cumpliendo asi una de las exigencias contractuales. ¡Genio y figura…!
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Copyright © 2009 – El Vianant
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